"Se te va a morir el perro, Brenda", la veterinaria viral explicó su icónica frase

Nuestras mascotas son unos más de la familia y como tales, siempre priorizamos darles lo mejor y, por supuesto, que cuando requieran de asistencia veterinaria, caigan en las mejores manos.

En nuestra provincia existen veterinarios que se comprometen, no solo con los animales, sino también con sus dueños. Este es el caso de Patricia El-Kadi, médica veterinaria, quien además es la única cardióloga equina-canina del norte argentino. A sus 43 años, logró abrir una veterinaria en el límite entre Capital y Yerba Buena y, sin dudas, es muy diferente al resto de las veterinarias.

El-Kadi procura que las mascotas, los niños y los adultos se sientan cómodos. Para eso cuenta con juegos para que los más pequeños puedan distraerse mientras los animales son atendidos. "Los gatos tienen lugares donde meterse y, si quieren jugar, tienen dónde ir subiéndose, trepándose y una vez que se relajó la consulta pasa a ser mucho más armónica, sin estrés y lo disfruta el dueño, el veterinario y la mascota", explica.

LA SALA DEL ADIÓS

  Como un espacio hecho para los momentos difíciles, cuentan con una Sala del Adiós. Un espacio de despedida para ese animalito que está dando sus últimos respiros y su familia. Con hermosos murales que reflejan el paraíso, perros, gatos, conejos y muchas otras especies conviven, juegan y son felices, mientras esperan a sus dueños para el reencuentro.

Patricia sabe que es muy difícil tomar la decisión de en qué momento vamos a poner a dormir a nuestra mascota que ya está sufriendo, que ya no tiene un tratamiento y para eso creó esta habitación, donde se puede acudir con los pequeñitos.

"La idea es mostrarle a los niños que esto es normal, todos sabemos que una vez que nacemos, en algún momento nos vamos a morir, pero que ellos van a despertar en lo que es el paraíso de los animales, donde van a volver a tener energías para jugar, para comer, para compartir con otros animales. De esta forma dejamos de hacer esto algo tan traumático y triste, pensando siempre en que es lo mejor para todos", explica la médica veterinaria.

DERRIBANDO MITOS

Patricia comenta que las personas llegan con muchas ideas equivocadas a la hora de la consulta. En ese sentido, explica que existen cuatro mitos muy frecuentes en relación a las mascotas. El primer mito se relaciona a la rabia: "Es un mito pensar que un perro que salió corriendo y te mordió o atacó a tu perro tiene rabia. Los perros con rabia generalmente tienen fotofobia, o sea, no soportan la luz solar, por lo que están escondidos en arboledas. Por eso es casi imposible que, por más que no esté vacunado, un perro que salió corriendo a atacarte en medio de la calle tenga rabia", explica. 

Sin embargo, informa que en los casos que sí es posible que un perro posea esta enfermedad, es cuando lo vemos bajo un banco de plaza o en un lugar alejado de la luz. Por eso, en esos casos, es mejor llamar a control animal.

El segundo mito más común es sobre las uvas. El-Kadi sostiene que es mentira que un perro puede intoxicarse por comer un par de uvas. Para que eso realmente suceda, el animal debería comerse un kilo de semillas de uva.

En relación a la castración comenta que, a pesar de que se haya intervenido al animal de esta forma, el mismo seguirá sintiendo placer: "Las glándulas prostáticas siguen en él, entonces él se va a chupar, masturbar, va a seguir eyaculando y sintiendo placer, aunque esté castrado", explica la especialista.

Por último, insta a las personas a dejar de lado el miedo a la anestesia en las mascotas. "Hay que perder el miedo ya que es un mito que se va a morir. El veterinario lo va a chequear con un electrocardiograma y lo va a monitorear para que todo salga perfecto", cierra.